Logos Cabecera
Canciller Castiglioni realizó precisiones sobre el Pacto Global de Migraciones
Publicado: 12/14/18 09:00:a. m.

Canciller Castiglioni realizó precisiones sobre el Pacto Global de MigracionesEl Ministro de Relaciones Exteriores, Don Luis Alberto Castiglioni, en conferencia de prensa ofrecida en la sede de la Cancillería Nacional, brindó un resumen de su participación en la ciudad de Marrakech, Reino de Marruecos, de la Conferencia Internacional sobre el “Pacto Mundial para la Migración Ordenada, Segura y Regular”, promovida por las Naciones Unidas, iniciativa a la que el Paraguay se adhirió para precautelar los derechos humanos más elementales de los más de dos millones de migrantes compatriotas que se encuentran diseminados por el mundo.

En la oportunidad, echó por tierra varios mitos y desinformaciones que fueron instalados en las redes sociales, los cuales se señalan a continuación.

Los mitos que impiden comprender la importancia del Pacto Global de Migraciones

Mito 1: El pacto implica ceder soberanía a la ONU. La ONU regulará de ahora en más las migraciones en el Paraguay y decidirá quién viene al país.

FALSO: El Pacto Global de Migraciones no es un tratado, no es un convenio, no es un acuerdo y por ende, no se firma ni se firmó.

Para que un instrumento internacional tenga validez en el Paraguay, es necesario que se firme, que lo apruebe el Congreso Nacional y luego lo ratifique el Poder Ejecutivo.

Se llama Pacto justamente para diferenciar de un Acuerdo o instrumento de carácter vinculante o cumplimiento obligatorio. Esto se adopta por aclamación.

Es más que nada un marco de referencia, un compromiso MORAL que consensuaron más de 160 países del mundo sobre el trato a los migrantes desprotegidos, indocumentados, víctimas de trata de personas y de otras formas de explotación, como ocurre incluso con migrantes paraguayos en el mundo.

El pacto tampoco cede soberanía a la ONU ni a nadie. El punto 15 c, del Pacto dice concretamente:

El Pacto Mundial reafirma que los Estados tienen el derecho soberano a determinar su propia política migratoria y la prerrogativa de regular la migración dentro de su jurisdicción, de conformidad con el derecho internacional. Dentro de su jurisdicción soberana, los Estados podrán distinguir entre el estatus migratorio regular e irregular, incluso al decidir con qué medidas legislativas y normativas aplicarán el Pacto Mundial, teniendo en cuenta sus diferentes realidades, políticas y prioridades, y los requisitos para entrar, residir y trabajar en el país, de conformidad con el derecho internacional.

El Paraguay es libre, independiente y soberano en determinar su política migratoria, y decidir quién entra y quién no entra a su territorio.

Mito 2: Si el Pacto no es vinculante ni obligatorio, ¿para qué se adopta?

Las leyes migratorias paraguayas ya son suficientes para garantizar derechos a los migrantes, como ha sido a lo largo de la historia.

FALSO: Las leyes migratorias paraguayas son excelentes y protectoras de los derechos humanos, pero rigen solamente en el Paraguay.

Al Paraguay como un país emisor de migrantes le importa no solamente tener buenas leyes que atiendan las situaciones de desprotección de los migrantes en nuestro territorio (como efectivamente hay), sino que tiene que buscar formaspara que los países de destino de migrantes paraguayos garanticen un mínimo de derechos, especialmente a los más vulnerables, que deben ser respetados independientemente de su estatus legal.

El Pacto no obligará a ningún país a cambiar sus leyes, pero por primera vez la comunidad de países llega a un consenso sobre sobre esta problemática y el trato digno que merecen los migrantes como toda persona humana.

Por ende, al Paraguay le interesa adoptar el Pacto porque promueve un interés nacional del Estado Paraguayo, que es la protección de sus ciudadanos, sin importar donde se encuentren ni en qué condiciones estén.

Pese a no obligar al Estado Paraguayo ni a ningún otro Estado, es un avance para visibilizar una problemática que _hasta la adopción de este pacto_ no formaba parte de la agenda internacional y requiere cooperación entre los Estados para abordarla de manera más efectiva.

En América Latina, vivimos crisis migratorias muy importantes, como ser la de Venezuela y Nicaragua. Todos los países de la región están recibiendo grandes cantidades de migrantes de estos países. No es el caso de Paraguay.

Los países que reciben grandes grupos de migrantes no pueden abordar la problemática derivada de estas migraciones solos, sin que haya un entendimiento mínimo de cómo abordar la cuestión y los problemas que conllevan.

Mito 3: El Pacto establece una cuota de cuántos migrantes debe recibir cada país. Algunos dicen 100.000 migrantes por año.

El Paraguay se va a llenar de refugiados de países musulmanes y africanos, que invadirán nuestra cultura y destruirán nuestras tradiciones, como ocurre en Europa.

FALSO: Ni un párrafo del Pacto obliga a ningún país a recibir migrantes. No se establece ninguna cuota de cuántos migrantes debe recibir cada país.

Paraguay y todos los Estados seguirán siendo libres y soberanos de decidir quién entra, quién no entra y quién permanece en su territorio, de conformidad con sus propias leyes.

No hay ningún compromiso de recibir a nacionales de ningún país, ni a refugiados de ninguna parte del mundo, ni a grupos que profesan una religión en particular.

No cambiará nada en el Paraguay ni en su política migratoria.

Nuestra política migratoria desde siempre está en sintonía con el Pacto.

Lo que queremos es otros países adopten una política migratoria respetuosa de los derechos, como es la nuestra.

Mito 4: El Pacto obliga al Paraguay a proveer salud y educación gratuitas a los grupos de migrantes que vendrán a Paraguay.

Ni siquiera hay recursos para los nacionales, y ahora se sumarán los refugiados que vendrán al Paraguay.

FALSO: Pacto no obliga a brindar ningún servicio o atención extraordinaria a los migrantes ni refugiados. El Pacto no compromete recursos financieros del Estado paraguayo.

Más bien permite que haya cooperación entre Estados para atender problemáticas derivadas de las migraciones de sus ciudadanos.

Lo que sí el Pacto dice es que si un país DECIDE VOLUNTARIAMENTE recibir algún migrante debe garantizarle igualdad de trato en el ACCESO a determinados servicios públicos según las leyes del país, como ser la Justicia, el Debido Proceso, la Seguridad Social, la Salud, la Educación, entre otros.

Es decir, que por el hecho de su nacionalidad, no se les niegue el acceso a los servicios públicos. No que se les den beneficios gratuitamente o un régimen privilegiado por encima de los nacionales.

Esto es en el caso de que un país DECIDA LIBREMENTE recibir a un determinado grupo de migrantes. Eso es lo que esperamos de parte de los países que reciben a los migrantes paraguayos.

Mito 5: El Pacto promueve la ideología de género, el aborto y la ideología LGBTI.

FALSO: El Pacto no habla de ninguna de estas cuestiones.

El Pacto habla de políticas de inserción de los migrantes con perspectiva de género, que no es lo mismo que ideología de género ni identidad de género.

En el derecho paraguayo, Género se refiere únicamente a HOMBRE Y MUJER, y nada más que eso. Ya lo aclaramos en el comunicado oficial.

Perspectiva de género implica incluir la diferencia entre las realidades del hombre y la mujer en las políticas públicas. O sea, que hay que atender especialmente la realidad de la mujer y la niña migrante, las embarazadas, la separación de familias, hogares encabezados por mujeres, las redes de prostitución y trata de personas.

Todas estas son realidades que afectan a la mujer migrante paraguaya y que el Estado debe atender.

En cuanto al aborto, si existen dudas sobre cierta terminología como “Paquete de Servicios Iniciales Mínimos”. Ya se aclaró que los términos del Pacto se interpretarán de conformidad con la Constitución Nacional y las leyes vigentes, que garantizan el derecho a la vida desde la concepción natural hasta la muerte natural.

Si existen dudas sobre el alcance de la palabra género también ya se aclaró que se interpretará en el sentido de nuestra Constitución y leyes.

Nuestra posición es concordante con la visión de la Santa Sede y sus objeciones a ciertas palabras del Pacto, que se subsana con la aclaración que realizamos.

Nuestra Constitución y nuestras leyes prevalecen y son las que determinarán cómo interpretaremos cada una de las palabras del pacto, que repetimos, es un marco referencial y no obligatorio.

¿Por qué adoptamos el Pacto Global de Migraciones?

- Porque la migración produce impactos nacionales, regionales y globales.

- Porque es un marco de referencia en materia de cooperación entre países para abordar los temas migratorios que no se pueden solucionar individualmente

- Porque reafirma la libertad soberana de los Estados para definir su política migratoria, es decir, para establecer, cómo cuándo y de qué forma tratar sus migraciones.

- Porque no obliga a recibir ni permitir la llegada masiva de migrantes.

- Porque es un instrumento flexible para que cada país lo adapte a su propia realidad y necesidades.

- Porque fortalece la lucha contra la trata y el tráfico ilícito de personas, entre las que hay lastimosamente muchos paraguayos.

- Porque favorece a los más de 1 millón de paraguayos migrantes que se encuentran fuera del país.

- Porque promueve la facilitación y abaratamiento del envío de remesas de los migrantes, que son el producto de su esfuerzo y sueño de progreso individual y familiar.

- Porque, si finalmente, el Paraguay decide no implementar el Pacto, tampoco pasa nada ni incurrimos en responsabilidad internacional.


Asunción, 14 de diciembre de 2018



Compartir esta noticia


Últimas Noticias Publicadas