DISCURSO DEL PRESIDENTE CARTES
El Presidente de la
República del Paraguay, Don Horacio Cartes, y la Presidenta de la
República Federativa del Brasil, Doña Dilma Rousseff, con el
acompañamiento de altas autoridades de los dos países, encabezaron la
Ceremonia de Inauguración del Sistema de Transmisión de 500 kV que se
llevó a cabo en la Sub-Estación de la margen derecha de la central
hidroeléctrica de Itaipú Binacional, sobre el río Paraná, en la ciudad
de Hernandarias, Departamento del Alto Paraná.
Hernandarias, 29 de octubre de 2013
En el acontecimiento el Presidente Cartes pronunció un discurso cuya reproducción se ofrece en los siguientes párrafos:
Señora Presidente:
Saludo
con especial satisfacción su ilustre presencia, en poco más de dos
meses con esta de hoy, es la quinta ocasión que tengo el honor de
compartir un encuentro con Vuestra Excelencia. La primera de ellas en
Asunción, en la víspera de asumir la Presidencia de mi país, la segunda
el día de mi investidura el pasado 15 de agosto, la tercera en la
Reunión de UNASUR en Surinam, la cuarta con motivo de mi visita de
Estado a Brasilia, y la quinta, en esta histórica habilitación oficial
del Sistema de Transmisión en 500 kV en territorio paraguayo de la
energía generada por la mayor represa hidroeléctrica del mundo, la
Itaipú Binacional, que nos pertenece en condominio a Brasil y Paraguay.
Todos
estos encuentros tienen un denominador común, la singular dimensión que
han cobrado las relaciones entre nuestros dos países, en el marco de un
nuevo impulso por proyectar a Paraguay y Brasil, unidos por la
geografía, por la historia, y por la convivencia de sus hijos, a un
destino superior para nuestros pueblos.
Tengo palabras y
sentimientos y gratitud para la Presidenta Dilma, quien sin vacilación
alguna ha puesto a disposición de nuestro Gobierno todo cuanto Brasil
puede aportar de su rica experiencia y posibilidad para nuestro
desarrollo, sobre todo sus programas de combate a la pobreza, a
sabiendas que la principal bandera de mi Gobierno es precisamente no dar
un segundo de tregua en la guerra que hemos declarado a la pobreza en
el Paraguay, buscando cambiar la suerte de muchos paraguayos por vía de
la dignificación humana.
Esta línea de transmisión que hoy se
habilita se inscribe también en la línea de las obras prioritarias que
mi Gobierno encara decididamente para lograr, en el menor tiempo
posible, insertar definitivamente al Paraguay en las vías del desarrollo
económico y social, en un mundo integrado e interindependiente.
Las
imponentes torres de acero que partiendo desde acá surcan nuestro
territorio, conducen no solamente energía limpia y renovable, vital para
nuestro desarrollo, sino también la posibilidad cierta de recibir en el
Paraguay cada vez más, el interés y la inversión de otros países, entre
ellos y fundamentalmente el Brasil, para instalar industrias y generar
desarrollo con la creación de genuinas fuentes de trabajo para miles de
compatriotas.
Como su Excelencia lo sabe, mi Gobierno está
empeñado en ofrecer al mundo un Paraguay atractivo, seguro serio y con
infinitas oportunidades, el Paraguay tiene lo que el mundo pondera:
naturaleza generosa, abundante tierra fértil, agua dulce, clima
propicio, atractivo marco impositivo, mayoritaria población joven,
energía suficiente, y hoy con satisfacción también puedo anunciar que
vamos concretando el marco jurídico adecuado, habiéndose aprobado ayer
en el Poder Legislativo, la importante Ley de Inversión Público-Privada,
que es uno de los elementos que abrirán las puertas al acelerado
desarrollo de mi Patria.
Hace pocos días tuve el honor de
participar en Asunción del foro Paraguay-Brasil, en esa ocasión el
distinguido visitante, el representante del Gobierno de Brasil, el
Viceministro Xavier Conte Da Rocha, dijo entre otras cosas, me llamó la
atención algo que quería decir, Paraguay es el secreto mejor guardado
en América del Sur, pero creo que hoy todos nos hemos dado cuenta de que
eso ya no es más un secreto, el mundo entero se despertó para el
potencial del Paraguay, y hoy día el país se hace conocer como un
verdadero imán de atracción de inversiones internacionales.
Sigue
diciendo el Viceministro, es en este contexto que los vientos
favorables a los negocios que los empresarios brasileños comenzaron a
ver el made in Paraguay, como una alternativa para mantener su
competitividad. Un número creciente de empresarios y misiones
comerciales brasileñas han desembarcado en Asunción para conocer el
país, y evaluar la posibilidad de transferencias de las unidades de
producción para el territorio paraguayo.
El Nuevo Rumbo que
propone mi Gobierno para el Paraguay, contempla también el propósito de
convertir antiguas dificultades en verdaderas oportunidades para el
desarrollo. Por siglos nuestra posición mediterránea ha sido el
importante impedimento para el despegue de Paraguay, sin embargo hoy
estamos convencidos que, ubicados en el corazón de América, nuestra
posición estratégica es ideal para conectar a través de obras de
infraestructura y de servicios por la vía de Paraguay los dos grandes
océanos, Atlántico y Pacífico.
Dependerá de nuestra habilidad e
ingenio convertir esas vías en las más convenientes para la poderosa
producción de toda la región brasilera limítrofe con nuestra patria, que
buscan los mercados a través del Pacífico.
Hablando de
dificultades que se convierten en grandes oportunidades, no podemos
olvidar que nuestra colosal Itaipú, es el fruto generoso de la
resolución de un inminente conflicto por cuestiones de límites entre
nuestros dos países, el entendimiento, superando las diferencias nos
legó a Paraguay y Brasil, la obra hidroeléctrica más grande del mundo.
La
Itaipú Binacional es indudablemente un formidable puente de real
integración, imprescindible para el desarrollo sostenido de nuestros dos
países, es por tanto, el más ferviente deseo de nuestro Gobierno y del
pueblo paraguayo que sea asimismo, un verdadero símbolo de
transparencia, de equidad y de buena vecindad entre la República del
Paraguay y la República Federativa del Brasil.
Al fin de cuentas,
la historia y nuestros pueblos nos recordarán a los gobernantes por lo
que hicimos a favor de nuestros pueblos, y no por nuestras diferencias
coyunturales. Lo que nosotros no hagamos, vendrán otros a hacerlo, por
lo tanto, no posterguemos más las oportunidades de trabajar juntos, de
crecer juntos, de desarrollarnos juntos, no solamente Itaipú y los
puentes nos unen, nos une sobre todo el enorme afecto, entre brasileños y
paraguayos, que quiero representar hoy en el modo como nuestros
queridos brasiguayos, que se han integrado a nuestra patria, para luchar
con nosotros por un destino mejor para nuestros hijos.
La
habilitación oficial del Sistema de Transmisión en 500 kV en esta
subestación margen derecha, es para nosotros un hecho tan impactante,
como aquel histórico acontecimiento del 20 de octubre de 1978, hace
exactamente 35 años, en que se desvió el cauce rumoroso del Paraná para
dar inicio a las obras de la Central Hidroeléctrica de la Itaipú, la que
mantiene hasta hoy el récord mundial en la producción de energía limpia
y renovable, que estoy seguro señores Directores, vamos a vencer ese
récord.
Felicito a los técnicos de ambos países que levantan en
alto esta obra que hoy habilitamos, una vez más han demostrado el
ingenio, talento y responsabilidad por los resultados, cualidades
esenciales que configuran la idoneidad en las tareas que han realizado.
Esta
obra es en síntesis, el producto de una amplia cooperación entre ambos
países, y el sistema de transmisión en 500 kV, refleja por otro lado, el
concepto que yo tengo del Estado, un Estado que trasciende la efímera
presencia de los hombres y la temporalidad de los Gobiernos, y que
resiste la presión del tiempo, para sostener inalterable la democracia,
el Estado de Derecho y la Justicia Social.
Asumo, señora
Presidente, que Brasil y Paraguay recién está en la etapa de la
cooperación, integración y complementación a la que estamos llamados a
contribuir, por mandato de la historia, la geografía y el futuro. Ese
llamado de nuestros pueblos que viene desde el fondo de nuestras
nacionalidades, las obras por realizar apenas han comenzado, en
infraestructura, la integración física nos compromete a la construcción
de numerosas carreteras y puentes uniendo nuestros territorios, nos
permiten la utilización de los océanos Atlántico y Pacífico.
También
la construcción de la vía ferroviaria para los trenes más modernos de
nuestro tiempo, así con las hidrovías para el mejor aprovechamiento de
nuestros ríos, y de ese modo, mediante un sistema multimodal,
insertarnos a todo el orbe y tener una presencia activa y favorable en
la globalización.
En materia de energía, aun son muchos los emprendimientos a lo que estamos comprometidos.
En
la parte hidroeléctrica y por la experiencia atesorada, nos convoca a
la construcción de dos o tres nuevas usinas, para responder a las
rápidas demandas de nuestros respectivos crecimientos demográficos,
urbanísticos, de producción, industrialización, servicios y desarrollo. Y
en cooperación también para la generación de energía eólica, solar,
biodiesel y otros, que a la vez de preservar el medio ambiente,
aprovechen adecuadamente lo que la propia naturaleza nos ofrece.
En
áreas del conocimiento y la innovación, la cooperación en educación y
cultura es fundamental, nuestras principales universidades tienen que
llegar a la interconexión académica para la excelencia en la formación
técnica, científica, profesional, y en la investigación teórica y
aplicada, a fin que con el calificado y competitivo capital humano,
podamos abreviar la ruta del desarrollo.
Señora Presidenta, estas
no son meras enunciaciones de sueños y esperanzas, son los proyectos
que ya nos esperan a concretar tras el acto que hoy protagonizamos, por
eso, estos encuentros de nuestros Gobiernos son importantes, pues son
las llaves para la prosperidad, el progreso y el bienestar general de
nuestros pueblos.
Soy un ferviente convencido de que la cultura
del diálogo, del respeto mutuo, de la confianza recíproca, y de la buena
fe, facilita la adecuada convivencia entre los hombres y enriquece el
relacionamiento entre los pueblos. Ese ha sido la característica
sobresaliente de la Política Exterior paraguaya, para conectarse con el
mundo, y fundamentalmente con los países de la región.
Cuando
existe voluntad política, ninguna barrera puede impedir la integración
justa, generosa y perdurable. Los Jefes de Estado, debemos ser la
herramienta que posibilite el logro de los anhelos de nuestros pueblos.
Quiero
resaltar en este acto, la sensibilidad y el afecto hacia el Paraguay
que he percibido en cada uno de los encuentros con la Excelentísima
Presidenta Dilma Rousseff.
Hoy se contempla el objetivo de la
mayor trascendencia y ya pensamos en otros más, porque en usted querida
Presidenta, hemos encontrado la apertura necesaria para hablar con
franqueza, y abordar proyecciones que consoliden y amplíen la
integración de nuestros dos países.
Finalmente como hombre
identificado con la democracia, el pluralismo y la convivencia,
considero que el más fecundo recurso en nuestras relaciones siempre
deberá ser el diálogo, la razón y la civilización cabalgan sobre el
intercambio de ideas, nuestra historia común así lo reclaman y nuestros
pueblos así lo exigen. Transitemos pues unidos el camino del desarrollo
económico y social, que esta línea de 500 kV, y todas las demás obras
que ya están y las que vendrán se constituyan en las arterias vivas del
corazón de América, palpitando la hermandad de Paraguay y Brasil.
Que así sea y que Dios bendiga a todos.
Muchísimas Gracias.
Discurso
da Presidenta da República, Dilma Rousseff, durante cerimônia de
inauguração conjunta da Linha de 500 kV entre Villa Hayes e a subestação
de energia da margem direita de Itaipu Binacional
Hernandárias-Paraguai, 29 de outubro de 2013
Excelentíssimo senhor Horacio Cartes, presidente da República do Paraguai,
Senhor Juan Afara, vice-presidente do Paraguai,
Senhor Julio César Velázquez, presidente do Congresso Nacional do Paraguai,
Senhor Antonio Fretes, presidente da Corte Suprema de Justiça do Paraguai,
Senhor Juan Bartolomé Ramírez, presidente da Câmara dos Deputados,
Senhoras e senhores ministros de Estado e integrantes das delegações do Paraguai e do Brasil,
Senhor Victor Raúl Romero Solís, presidente da Administração Nacional de Eletricidade do Paraguai – ANDE,
Senhor
Jaime Spalding e senhor Jorge Miguel Samek, diretores-gerais da Itaipu
Binacional, respectivamente, do Paraguai e do Brasil,
Senhoras e senhores jornalistas, senhoras e senhores fotógrafos e cinegrafistas,
Com
grande alegria retorno ao Paraguai para, em companhia do presidente
Cartes, inaugurar o terceiro maior projeto de infraestrutura, depois de
Itaipu e Yacyretá, da história do Paraguai. Esta linha de transmissão de
alta tensão, que conecta Itaipu à ViIla Hayes marca o início de uma
nova etapa do desenvolvimento deste querido vizinho do Brasil, o
Paraguai. A um custo aproximado de US$ 550 milhões, este é o maior
projeto já realizado com recursos do Focem, o nosso querido Fundo de
Convergência Estrutural do Mercosul, reforçado por contribuições
voluntárias do meu país. Contou ainda com aportes da ANDE paraguaia e de
Itaipu Binacional.
Esta linha de transmissão cobrirá, como
disseram os presidentes de Itaipu Binacional, cobrirá mais de 25% da
demanda por eletricidade do Paraguai e terá, sem dúvida, papel de
indutora do processo de industrialização. Uma energia limpa, uma energia
renovável, produzida por uma das maiores usinas de geração de energia
elétrica do Planeta, e que necessitava dessa interligação para garantir a
internacionalização dessa energia no Paraguai. Empresas brasileiras
aumentarão seu interesse em investir no Paraguai. Empresas
latino-americanas farão o mesmo. O aumento desses investimentos
promoverá uma aceleração virtuosa dos fluxos de comércio entre nossos
países e em toda a região. As empresas, brasileiras e paraguaias, que se
instalarão ao longo da linha de transmissão gerarão empregos, pagarão
impostos, aumentarão a renda disponível, concorrendo para o
desenvolvimento diversificado do país e de toda a região. Será, assim,
potencializada ainda mais a taxa de crescimento econômico expressiva do
Paraguai em 2013. Sem dúvida, tudo indica, a maior da América do Sul.
Essa
impressionante obra, presidente Cartes, deve servir ao objetivo de
integração das nossas cadeias produtivas, que é a forma mais equilibrada
de integração nesta região, beneficiando nossos povos, levando ao
desenvolvimento, à geração de empregos e também à melhoria das condições
de vida aqui na região.
Isso é prova de que o Mercosul está
forte e não se limita ao comércio, mas promove o desenvolvimento
buscando a superação das assimetrias entre os países da região. O Focem é
a expressão desse compromisso solidário, desse compromisso que busca,
justamente, superar essas assimetrias, que são perversas.
Na nova
América do Sul que estamos construindo, é preciso conceber as relações
entre os países, a relação entre o Brasil e o Paraguai, entre nós e
nossos vizinhos, como parte de um projeto maior. Nossas economias são e
serão, cada vez mais, interdependentes. Devemos complementar nossa ação
bilateral com iniciativas estruturadas em âmbito regional. Cabe ao
Mercosul e à Unasul alavancar o potencial de desenvolvimento de nossos
países para estabelecer um mercado ampliado, para garantir marcos
regulatórios comuns, para criar condições de desenvolvimento em todos os
países, em uma relação de ganha-ganha, que é crucial para a
estabilidade da região.
Com essa visão de integração Sul-Sul,
baseada não na exploração de uns pelos outros, mas baseada no interesse
recíproco, na responsabilidade compartilhada e na integração de nossos
países, é que alcançaremos nosso objetivo maior, nosso objetivo
conjunto: a promoção do desenvolvimento social e a melhoria da qualidade
de vida de nossas populações.
Querido amigo presidente Cartes,
Nós,
que em menos de dois meses já estamos nos encontrando pela quinta vez,
temos um compromisso com nossos povos. E eu queria, aqui, reafirmar o
compromisso do governo brasileiro de apoiar seu governo na luta contra a
pobreza. Podemos e queremos cooperar nessa área, porque o Brasil
desenvolveu, nos últimos anos, uma tecnologia social que temos orgulho
de transmitir a todos os países da região, em especial aos países
amigos.
Conforme ressaltamos em nosso último encontro, os
programas brasileiros Bolsa Família e Brasil Sem Miséria, e o programa
do Paraguai Creando Oportunidades, mostram que trilhamos o mesmo caminho
no tratamento da questão social. Uma forte parceria nesta área
permitirá que nossos países possam reduzir ainda mais as desigualdades e
construir uma nova realidade social para nossos povos.
Quero,
aqui, reafirmar a nossa disposição de, através das relações bilaterais e
através das relações multilaterais, no âmbito do Mercosul e da Unasul,
poder iniciar a construção de várias obras de infraestrutura. Queria, em
especial, nomear a segunda ponte sobre o Rio Paraná, entre Foz do
Iguaçu e Presidente Franco. Esta ponte será mais do que uma ponte, um
elo concreto entre nossos países, e tornará mais fluido o transporte de
cargas e auxiliará no escoamento das exportações do Paraguai.
Senhor Presidente,
O
Paraguai é, e sempre será, parceiro estratégico para o Brasil. O
governo e o povo brasileiro desejam um Paraguai forte, próspero e
respeitado. A inauguração da linha de transmissão é passo fundamental
nessa direção. Conte com o firme apoio do Brasil, Senhor Presidente.
Muito obrigada.